EL SEÑOR BURNS NO LLEGA A UN ACUERDO CON LA CADENA FOX

El actor Harry Shearer, que le da voz al inescrupuloso millonario, se mostró a favor de una reducción de su sueldo para mantener en el aire a la serie. A cambio, pidió que la cadena Fox comparta las ganancias

Lejos de la avaricia que caracteriza a uno de los personajes principales del programa, Shearer anunció que aceptaría una rebaja de un 70% de su sueldo con tal de continuar haciendo su trabajo. Su oferta supera la baja a los salarios del 45% prevista por la emisora.

El actor es uno de los pilares del elenco porque también da voz a Ned Flanders, Smithers, Kent Brockman, Lenny, el Doctor Hibbert, el Reverendo Alegría y el director Seymour Skinner.

Fox amenazó, hace pocos días, con no renovar la serie si el elenco de actores que prestan sus voces no accede a rebajas salariales, debido a que ya no sería rentable su realización por los altos costos de producción.

"Yo digo: está bien. Si los recortes salariales son lo que se necesita para mantener el show en el aire, entonces bajen el mío", afirmó Shearer en un comunicado. "De hecho, para hacer que sea lo más fácil posible seguir haciendo capítulos, estoy dispuesto a que me bajen no sólo un 45%, sino que más de un 70%", agregó.

A cambio, sólo pediría "una pequeña porción de eventuales ganancias" que diese el show. El actor, que aclaró que sólo hablaba por él y no por el resto de sus compañeros, contó que cuando sus representantes se acercaron a los ejecutivos de Fox con la propuesta fueron rechazados.

"Dijeron que no existía ninguna circunstancia en la que la cadena consideraría permitirme a mí, o a cualquiera de los actores, compartir parte del éxito", explicó.

La actual temporada -la número 23- podría ser la última para la familia de Springfield, ya que los seis actores principales del elenco -entre los que están las voces de Homero (Dan Castellaneta), Marge (Julie Kavner), Bart (Nancy Cartwright) y Lisa (Yeardley Smithse)- rehúsan aceptar el recorte del 45% de su salario, que asciende a 8 millones de dólares anuales.

Ellos exigen que la reducción sea del 30% y que se les permita acceder a las utilidades por las repeticiones del show, la venta de los capítulos, las regalías de la película y la venta de merchandising.