En los episodios finales, la acción se traslada a Mallorca. "Fue una semana espectacular. De mucho trabajo, porque grabamos dos capítulos en nueve días, pero nos llevaron por sitios espectaculares, paisajes increíbles. Que el final de 'Pulseras' transcurra fuera del hospital ha sido un regalo". Àlex está muy satisfecho con la emoción que trasmiten esas escenas de despedida: "Está lleno de momentos preciosos. Los más bonitos de toda la serie. El mejor reflejo de las dos temporadas".
El final, deja muchas dudas en el aire. "Me gusta que sea así. ¿Morirá Lleó? ¿Volverá al hospital? Lo bonito es que cada espectador puede imaginar cómo serán los próximos meses en la vida de los pulseras… Nosotros lo vivimos con mucha expectación, nos iban pasando el guión conforme grababámos y no supimos cómo acaba hasta un mes antes. ¡Nos pasábamos el día hablando de esto!".
Àlex recuerda con especial cariño las escenas que ha compartido con Lluis Homar (Benito) en ese último capítulo: “Fue un gustazo grabar con él porque es un gran señor y, encima, superhumilde. Se puso a mi disposición con unas ganas y una generosidad que nunca olvidaré”, confiesa.
Le preguntamos a Àlex si fue dura la despedida del equipo. "Cuando acabé la primera temporada sí fue triste porque tenía miedo a no verlos más, pero ahora sé que si quieres a alguien, eso no pasa. Así que no sufro. Aunque estemos dos meses sin vernos, sé que cuando lo hagamos todo volverá a ser como antes. Lo que hemos creado es más fuerte que cualquier distancia, porque lo que nos ha pasado ha sido de verdad".
Si volverán a encontrarse grabando más 'Pulseras' es un misterio, ya que Albert Espinosa, el creador de la serie, ha asegurado que, si hay tercera temporada, será con los protagonistas ya convertidos en adultos. “Estoy de acuerdo, hay que ser honestos y esperar unos años para ver si podemos dar mayor profundidad a la historia. Y si se queda ahí no pasa nada porque hemos hecho dos entregas magníficas”, opina Àlex.
