"Me encontré con el momento más difícil de mi vida. Voy a recordar siempre su mirada". Leandro Cabo Guillot era el novio de la modelo y periodista Jazmín de Grazia y quien acudió a su departamento en el barrio de Recoleta ante el peor de los escenarios.
"Ella había salido con amigas y estaba todo bien. Al otro día me llama cerca de las 5 de la tarde y me dice que no se sentía bien. La escuché mal y salté de la cama. Tardé 15 minutos", pero no fueron suficientes.
El testimonio de Leandro fue desgarrador, y entre lágrimas, se lamentó por no haber llegado antes.
"Yo no tengo llaves, ella es muy independiente en todos los aspectos de su vida. Llamé y no atendía. Llamé al papá, me dice que él tampoco tenía llave. Toqué timbre 5 o 10 minutos, pateé la puerta, grité, me fui abajo, llamé al portero. Quería tirar la puerta abajo. Ahí me dijeron que llame a un cerrajero, tardó 15 o 20 minutos y seguí golpeando. Hablando detrás de la puerta".
"Cuando entré y vi el celular, me dije: 'esta boluda se fue' y pensé: 'que suerte que no está'. Pero giré y la encontré. Ahora quiero resguardarme, el dolor que siento en muy fuerte".
Aseguró que sólo hablaba por Jazmín y la describió como una persona que vivía atormentada: "Conmigo era una persona brillante y atormentada, por ella misma, por su cabeza y su exigencia y su manera de encarar el mundo. Ella tenía que demostrarse a ella y a todo el mundo que era la periodista que escribía como nadie. Era una persona increíble, la amé con locura, siempre estuve con ella y la cuidé".
Por su parte reconoció que la modelo y periodista estaba bajo tratamiento psiquiátrico.
"Jazmín estaba con tratamiento. Era una persona que se sentía angustiada por momentos y entonces sentí que me necesitaba y no di muchas vueltas".
Hace un año aproximadamente que Leandro y Jazmín comparten sus vidas, y dentro de los proyectos que tenían estaba el de trabajar, y convivir.
"Teníamos planes de irnos a vivir juntos. Ella me hizo crecer como si fuera un niño. Éramos cómplices, nos reíamos, nos fuimos de viaje a Europa. Estuvimos viendo festivales. Hoy me desperté soñándola. Tengo un dolor en el pecho que no se va a ir".
En sus palabras, Leandro remarcó la necesidad de Jazmín de ser reconocida como profesional, como periodista, y dijo que el haber perdido su trabajo en el programa Duro de Domar fue algo muy difícil para ella.
"Ella prefería comer arroz, morirse de hambre antes que traicionar sus valores. Ella decía lo que ella sentía en la cara y yo se que la tenían como una persona muy frontal y eso a veces asusta".
Para finalizar, Leandro se despidió entre lágrimas y con la voz quebrada dijo: "Estoy devastado".
Infobae.com