Lejos de Barbarita Vélez el actor Chileno realizó una producción de fotos para la revista "Cosas" en donde ademas habló de su vida personal. "Hoy estoy poniéndole toda la onda a mi disco, viajando seguido a Argentina, a Los Ángeles… Me gusta estar activo y poder ir superándome y aprendiendo constantemente”, señaló.
LA ENTREVISTA COMPLETA:
–¿Sientes que te has perdido muchas cosas por tu trabajo?
–Elegí tener otras cosas. Puede que a unas personas no les hubiese gustado mi vida y a otras sí, pero opté. Esta es mi carrera, gracias a Dios me ha ido bien y voy a seguir en esto.
–¿Te has arrepentido de esta elección?
–Nunca. Siempre he encontrado momentos para todo. Cuando he tenido que entregarle tiempo a mi familia, he podido hacerlo. Obviamente los veo menos, porque viajo y vivo temporadas en otro país, pero son cosas que tengo que vivir para tener la carrera con que sueño. No me arrepiento de nada.
–¿La exposición te ha causado problemas?
–Sí, obvio. Hay mucho hambre de la prensa por saber de mi vida, pero es normal y ya me acostumbré. Trato de no pescar. Respeto mucho a la prensa, porque hace su trabajo y tengo la mejor de las ondas con todos, nunca me he enojado con nadie, pero me mantengo al margen.
–Siempre está latente el escándalo y debe costar desentenderse de esto.
–Yo no tengo mucho que ocultar. Soy como me ven. Hay gente que dice que parezco niño bueno, pero que debo ser malo. Pero nada que ver. No tomo mucho alcohol, no fumo, no me drogo… nada. Salgo con chicas, pero nada más. Tratan de buscarle la cinco patas al gato y no hay nada que ocultar de mi parte. Es una lata que inventen cosas y ahí hay que hacer oídos sordos y concentrarse en uno.
–¿Por qué aceptaste ser parte de la campaña de la PDI contra el grooming o acoso a menores por Internet?
–Encontré que era una buena oportunidad para comunicarme con mis fans desde otro lado, algo más responsable. Nunca había tenido la oportunidad de hacer algo así y, con la exposición que he tenido, siento que es bueno hacerlo. –Es algo que te suma responsabilidad.
–Obvio, pero esa responsabilidad la tengo, quiera o no. El día de mañana puedo tuitearlo sin que sea parte de ninguna campaña y la responsabilidad es distinta. El grooming es algo a lo que mis fans están muy expuestas, por el uso de las redes sociales y esto me llevó a sumarme a la campaña.
–¿Es agobiante a los 22 años sentirte responsable de tus fans?
–No me siento responsable de ellas. No me agobia. Es satisfactorio poder darles un consejo. Si puedo ayudar, lo hago feliz.
–¿Dónde encuentras cobijo cuando estás solo, en el extranjero, trabajando?
–La tecnología ayuda mucho. Puedo hablar por Skype con mi mamá, mi hermana o mis amigos cuando quiero. Los dos años que viví en Buenos Aires me hice de muy buenos amigos, que son como hermanos para mí, y fueron muy importantes en ese momento. Siento que tengo una familia en Argentina. En el camino uno encuentra gente que te ayuda a no sentirte tan solo, pero depende de uno. Cuando vas de gira estás solo en los hoteles y yo me acostumbré a eso. Ahí tengo tiempo para mi música, para pensar, cantar… lo que se me ocurra.
–¿Cómo lo vive tu familia? Porque también dejas un vacío cada vez que te vas.
–Ellos son los que más sufren. Yo he logrado acostumbrarme y voy a seguir en esto. Mi mamá me apoya en mi carrera, pero sé que es complicado para ella verme partir por períodos largos. Es difícil para mi mamá y para mi hermana, pero con el tiempo nos hemos ido acostumbrando. Han pasado varios años de este ir y venir, y sé que están orgullosas de lo que hago.
–¿Uno se acostumbra realmente a esta vida?
–Uno se logra acostumbrar. Hay momentos más difíciles que otros.
–¿Qué es lo más complicado de tu carrera?
–Tengo una carrera maravillosa… Creo que la exposición en la prensa puede ser lo único que me complica. Es penca para uno y para la familia.
–Dentro del mundo del espectáculo, llevas una vida alejada de los escándalos. –Aunque siempre está el riesgo, me encanta esto. Me encanta tener éxito, porque se disfruta; me encanta fracasar, porque de eso aprendes. En esta carrera tienes que estar siempre jugado y hacerlo con pasión.
–¿El bajo perfil que mantienes es a propósito, para cuidarte, o no te nace exponerte más?
–Siempre he hecho lo que quiero. No me he puesto frenos, pero no oculto nada. Si viene “SQP” a ponerme un micrófono, no tendría mucho que contarles. Hoy estoy soltero, trabajo mucho y nada más. Cuando estuve pololeando inventaron un montón de cosas…
–¿Te ha costado estar en pareja?
–Uno tiene que tener la capacidad de guardarse, cuidarse y cuando uno es chico y apasionado, la relación se puede exponer más de la cuenta. Pero creo que no debiera ser difícil tener una relación.
–Decías que te gustaba el fracaso, porque de eso aprendes. ¿Cuándo duele y molesta perder?
–Desde siempre he pensado que todo pasa por algo. Si me va bien o mal es por algo y pensar así me ayuda mucho. En los momentos de fracaso, lo paso mal, no gozo con eso, pero tengo gente a mi lado que me ayuda a levantarme cada vez que he tropezado. Sigo trabajando para hacerlo mejor y no cometer los mismos errores.
–¿La temprana partida de tu padre desarrolló en ti un instinto de supervivencia?
–La muerte de mi papá, cuando chico, me tocó mucho y ahí comencé a pensar que todo pasa por algo. Mi carrera y todo se lo debo a él, independiente de que no esté acá.
–¿Te ha faltado una figura paterna, al quedar con tu madre y tu hermana?
–No. Mi mamá está casada y él ha sido como mi segundo papá. Ha estado siempre ahí, me ama y yo lo amo a él. Siempre ha estado como un padre, por lo que he tenido una figura paterna. Obviamente extraño a mi papá, me hubiera encantado compartir más con él, pero no se pudo. Él se fue para ayudarme desde otra parte. Siempre quiso tener un hijo hombre, por lo que irse tan temprano también le debe haber dolido.
MI CARRERA, MIS DECISIONES
–Has tenido una carrera muy larga a pesar de tu juventud. ¿Hacia dónde te vas a enfocar? Porque actúas, bailas, cantas… ¿Dónde te sientes más cómodo?
–Es una cosa de momentos. Desde chico me ha gustado cantar, bailar, actuar… son cosas que no necesariamente van separadas. Para mí, son cosas que van de la mano. Me pregunto si tuviese que elegir una de ellas… y no tengo respuesta. Hoy necesito tener herramientas para trabajar en las diferentes áreas de esta profesión. Si mañana me llaman para un musical, tengo que poder cantar y bailar, para hacer un buen personaje. La versatilidad ha sido un plus para mi carrera y yo quiero mantenerla. Por eso tomo clases de baile, actuación… trato de estar vigente. Tengo 22 años, soy muy chico a pesar de que llevo casi nueve años en esto y me queda mucho por delante. Quiero seguir aprendiendo y superarme.
–Trabajaste en Argentina, donde muchos chicos de tu edad tienen carreras con similar éxito que la tuya, pero en Chile eres de los pocos que tiene un currículum tan grande a los 22 años. ¿Sientes algún peso por esto?
–Me siento afortunado de haber hecho todo esto y de tener todo este conocimiento. Le doy gracias a Dios y a mi familia. Trató de no imponerme presiones más allá de las que puedo manejar. Quiero mejorar y superarme y, si la gente me mira distinto por lo que hago, trato de no fijarme en eso y de seguir con el camino que he trazado.
–En la presión que te impones, ¿hasta dónde estás dispuesto a llegar?
–Me exijo para no caer en la monotonía. La gente evoluciona muy rápido y quiere cosas nuevas y distintas. Es bueno crecer en la música, con los nuevos métodos de actuación y los límites son infinitos. Cada minuto que pasa las cosas son distintas, me pueden dar ganas de hacer otras cosas. ¡Hoy mis energías son infinitas!
–¿Dónde está tu meta actual?
–Ahora mi meta máxima es mi disco. Tuve la fortuna de conocer a Humberto Gatica y que él haya querido trabajar en mi proyecto es increíble. Hemos armado un equipo fantástico en Estados Unidos y estoy haciendo esto con mucho cariño y toda mi fuerza. Me encanta la música, me apasiona. Quiero tener el disco en mis manos, hacer conciertos, promocionarlo y ver qué pasa con esto. Las expectativas son muchas, pero hay que tomarse las cosas con calma, porque la música es efímera.
–¿Pretendes desarrollar tu carrera musical en grande? Porque es distinto el ritmo y la exposición de un actor que el de un cantante.
–La música es muy linda y me encanta, más allá de si repleto un lugar para un concierto. Muchas veces se me han acercado personas a decirme que con mis canciones han enamorado a sus pololas. Eso es lo mejor que me ha pasado, mucho más que llenar un estadio. La sensación de que alguien se emocione con tus canciones y le pasen cosas importantes gracias a ellas, es lo máximo. Eso es lo que yo trato de generar… que les llegue al corazón.
–¿Te asusta cuando vez figuras internacionales como Justin Bieber o a MileyCyrus que partieron como personajes cándidos y hoy llevan una mochila de escándalos? ¿Te asusta que el éxito te lleve al exceso?
–Ellos son figuras reconocidas a nivel mundial. En cada esquina del mundo donde se paren los van a reconocer. Esa exposición hay que cuidarla y saber llevarla. Cuando empiezas chico, te puede afectar. No sabes si el camino que tomas es porque tú lo quieres o porque te están obligando a tomarlo…
–En tu caso, ¿las decisiones de tu carrera las has tomado tú?
–La toma de decisiones de mi carrera pasa primero por mí; luego, por mi mamá y mi manager. Somos un equipo de trabajo que discutimos todo, pero nunca hago algo que no quiera hacer. Esto permite que pueda disfrutar de la vida.
