"Dejé de hacerme estudios porque me 'bajoneaba'", aseguró la cantante, quien por el momento optó por pasar tiempo junto a su hija y recuperarse de manera natural de sus problemas vocales.
"Yo me siento bien, bajar el ritmo del trabajo ayudó un montón porque no me quedo sin voz y disfrutó un poco más", expresó la joven de 28, que a su vez, dijo que "se siente de 35" por el exceso de cansancio y trabajo.
"Trabajé 10 años, desde los 18, y uno se cansa de trabajar todas las noches, de dormir de día, hacer todo al revés. Mi hija me lo reprochaba un montón", manifestó Karina.